Sabiduría de Tunkáshila

 

 

 

La gente debería pensar en sus palabras
como si fuesen semillas. 
Deberían plantarlas,
y luego permitirles crecer en silencio. 
Nuestros ancianos nos enseñaron
que la tierra siempre nos está hablando, 
pero que debemos guardar silencio para escucharla.

 

 

 

 

El pueblo Lakhota (que llamamos habitualmente sioux), sabía que la sabiduría había que buscarla en el silencio, en la escucha de la naturaleza y en la enseñanza de los "abuelos" (Tunkáshila).

 

Durante el año 2008 fuimos publicando en nuestro foro una serie de frases y textos de la sabiduría de los indios americanos. Queremos, ahora, compartir este tesoro con todos.

 

La lista que os ofrecemos no pertenece sólo al pueblo Lakhota, hemos recurrido a veces a la voz de otros abuelos.

 

 

"Nuestros ancianos fueron educados en las maneras del silencio, y ellos nos transmitieron ese conocimiento a nosotros.

 

Observa, escucha, y luego actúa, nos decían. Ésa es la manera de vivir."

 

 

 

"Amigo, hazlo de esta manera:
es decir, cualquier cosa que hagas en la vida,
haz lo mejor que puedas
con tu corazón y con tu mente.
Y si lo haces de esa manera,
el Poder del Universo vendrá en tu ayuda,
si tu corazón y tu mente están Unidos. 

Cuando uno es miembro del Círculo de la Gente
uno debe ser responsable,
pues Toda la Creación está relacionada,
y el dolor de uno es la herida de todos,
y el honor de uno es el honor de todos,
y todo lo que hacemos afecta a todo el Universo. 

Y si lo haces de esta manera, es decir, 
si verdaderamente unes tu corazón y tu mente 
como Uno Solo,
cualquier cosa que pidas así será".

(Palabras de Pta Win al Pueblo Lakhota)
Pta Win, la Mujer Bisonte Blanco fue la que trajo la Pipa al pueblo Lakhota. Si quieres leer su historia abre el siguiente enlace

 

 

La vida no es siempre como queremos, 
pero cada día podemos hacer por lo menos 
algo para mejorar nuestra vida, 
nuestro hogar,nuestro trabajo o tiempo libre. 
Incluso podemos aprender a saludar a los vecinos 
con una sonrisa en vez de pasar en silencio...
y verás lo que sucede. 

(enseñanza de Mischa, Cherokee/Alemana)

 

 

 

A la gente blanca le gusta discutir. 
Ni siquiera permiten que el otro termine una frase. 
Siempre interrumpen. 
Para los indios esto es muy irrespetuoso e incluso muy estúpido. 
Si tú comienzas a hablar, yo no voy a interrumpirte. Te escucharé. 
Quizás deje de escucharte si no me gusta lo que estás diciendo. 
Pero no voy a interrumpirte. 
Cuando termines, tomaré mi decisión sobre lo que dijiste, 
pero no te diré si no estoy de acuerdo, 
a menos que sea importante. 
De lo contrario, simplemente me quedaré callado y me alejaré. 
Me has dicho lo que necesito saber. 
No hay nada más que decir. 
Pero eso no es suficiente para la mayoría de la gente blanca.

 

 

"La tierra es parte de mi cuerpo. 
Pertenezco a la tierra de la que vengo. 
La tierra es mi madre".

Tunkáshila Tuhulkutsut (Nez percé)

 

 

Si quieres llegar a ver la LUZ, 
primero has de vencer tu propia oscuridad. 

(enseñanza espiritual Cherokee)

 

 

Nosotros creíamos que todo era un regalo, 
y que un buen hombre o una mujer buena compartían esos regalos.
La gente buena pensaba que debían dar, 
y no que debían recibir. 

No medíamos a la gente como rica o pobre. ¡No sabíamos cómo! 
Cuando los tiempos eran buenos, todos éramos ricos. 
Cuando los tiempos eran malos, todos éramos pobres. 
Medíamos a la gente por cómo compartían.

 

 

 

Cada paso que se hace sobre la tierra
debería ser como una oración.

Hehaka sapa (Alce negro, sioux oglala)

 

 

Poseer cosas es muy importante en la vida de la gente blanca. 

Desde el principio te dicen: "Esto es mío, esto es tuyo", "No toques eso porque no es tuyo". 

Te dicen que te alejes de las cosas por la posesión, y no por respeto.

En los días de antes, nosotros nunca teníamos cerraduras en nuestras puertas. No existía el robo, pero si alguien tenía hambre, podía entrar a tu casa y tomar comida. 

¿Porqué la gente no tomaba las cosas? 

Por respeto.

Filosofía Lakhota

 

 

El único regalo que los seres humanos deberían dar es el tiempo y a sí mismos.

 

 

Las cosas son importantes cuando las necesitamos. Si no las necesitamos, no son importantes. 
Nuestros ancestros creían que tú eras dueño de algo sólo mientras lo necesitaras. Luego se lo pasabas a alguien más. 

Pensamiento Lakhota

 

 

Debemos comprender que todas las cosas son obra del Gran Espíritu. Debemos saber que Él está en toda cosa: en los árboles, las hierbas, los ríos, las montañas, y todos los cuadrúpedos y los pueblos alados; y, lo que aún es más importante, debemos comprender que Él está también más allá de todas estas cosas y de todos estos seres. Cuando hayamos comprendido todo esto profundamente en nuestros corazones, temeremos, amaremos y conoceremos al Gran Espíritu; entonces nos esforzaremos para ser, actuar y vivir como Él quiere.

 

Hehaka sapa - Alce negro (sioux oglala)

 

 

Una persona no era maestro por haber sido elegida o por obtener un certificado. 

Una persona era maestro porque sabía algo y era respetada. Si no sabía lo suficiente, no era maestro. 

O si nosotros no necesitábamos saber lo que ellos sabían, no acudíamos a ellos.

 

 

En nuestra forma de vida, todo tenía su uso y luego regresaba a la tierra.

Teníamos tazas y platos de madera, o cosas hechas de barro. Cabalgábamos o caminábamos. Hacíamos cosas de las cosas de la tierra. Después, cuando ya no las necesitábamos, las quemábamos o las dejábamos, y regresaban a la tierra. 

Ahora ya no podemos hacer eso. Ahora las cosas ya no regresan a la tierra.

 

 

Hay espíritus para ayudarte. Hay espíritus para ayudarnos a todos. Si tan solo tu gente aprendiera a escucharlos, a meterse en la luz del sol y dar gracias por el día, los encontrarían. Entonces no harían daño tan fácilmente, ni podrían descansar de noche tan fácilmente cuando pasaron el día trabajando sólo para ellos mismos.

 

 

¿Quieren saber cómo pueden parecerse a los indios? 

Vivan cerca de la tierra. Desháganse de algunas de sus cosas. Ayúdense unos a otros. Hablen con el Creador. Guarden más silencio. Escuchen a la tierra en vez de construir cosas sobre ella todo el tiempo.

No culpen a otros por sus problemas, y no traten de convertir a las personas en algo que no son.

 

 

La tierra es profunda, y su sabiduría es grande. Escucha a las piedras, y escucha al viento. Haz lo que tengas que hacer para encontrar las voces que habrán de hablarte. Ahí están. Están llamando. Haz lo que tengas que hacer para encontrarlas, y comparte sus palabras.

 

 

Todos hemos nacido de una mujer, auque somos diferentes en muchas cosas. No nos pueden hacer de nuevo. 

Vosotros sois tal y como os hicieron, y tal como os hicieron podéis seguir siendo. Nosotros somos tal y como nos hizo Wakan tanka, y no podéis cambiarnos; entonces, ¿Por qué habrían de pelearse los hijos de una misma madre y de un mismo padre?, ¿por qué uno habría de engañar a otro? 

Yo no creo que el Jefe Wakan tanka diera a una clase de hombres el derecho de decir a otra clase de hombres lo que deben hacer.

Jefe Jopseph, nez percé

 

 

Lo más importante para la gente blanca es la libertad. 
Lo más importante para los indios es el honor.

 

 

El templo del indio era el propio mundo de la naturaleza, y desde dentro de este santuario mostraba un gran respeto hacia toda forma, función y poder. El que el indio considerase sagradas todas las formas naturales que le rodeaban no constituye un hecho único, pues otras tradiciones respetan las formas creadas como manifestaciones de las obras de Dios.Pero lo que es casi único en la actitud del indio es el hecho de que esta veneración hacia la naturaleza u hacia la vida es un aspecto central de su religión: cada forma del mundo que le rodea lleva en sí tal cantidad de valores y significados precisos que tomados en su conjunto constituyen lo que se podría denominar su “doctrina”.


Joseph E. Brown

 

 

Cuando un hombre realiza una obra que es admirada por todos, decimos que es maravillosa; pero cuando vemos los cambios del día y la noche, el sol, la luna y las estrellas del cielo, y el cambio de las estaciones en la tierra, con sus frutos que maduran, todo el mundo debe darse cuenta de que es la obra de alguien más poderoso que el hombre.


Perseguido por osos (Sioux santee-yanktonai)

 

 
Los ojos implorantes de un niño pueden decir centenares de palabras. El cuerpo roto y curvado de un Anciano nos habla de una vida dura. Las marcas de dolor en el rostro de otro ser humano pueden delatar cargas arrastradas durante muchos años. Mucha gente en esas condiciones puede no sentirse suficientemente segura para hablar de su dolor o puede no saber cómo deshacerse del peso de sus cargas.


El silencio y la paciencia pueden abrir el espacio que permite que otro pueda expresar esos sentimientos que habían estado tan encerrados. Los reservados, que han soportado el peso de un abuso, usan muchos métodos de comunicación sutil para expresar sus sentimientos. Los tímidos pueden haberse visto silenciados por los que los rodean, tan sumisos en su propio enfado que el furor de sus sentimientos no ha dejado espacio para que los otros se expresaran.


El individuo inteligente mira y oye las señales implícitas que exigen la necesidad de ser reconocidos. El oyente amable y sensible sabe crear seguridad y espacios para compartir que permiten a los demás expresar sus necesidades. Este tipo de oyente observa el lenguaje sutil del corazón en medio de los demás, respetando el tiempo apropiado para que la confianza crezca entre el hablante y el oyente. El oyente astuto llega a los demás escuchando con los ojos, con la nariz, con los oídos y con el corazón del espíritu y de esta manera puede curar las heridas.
 

 

 

 

El líder

Toro Sentado fue un líder. Él fue un gran jefe. La gente lo seguía porque era magnífico. Él nunca ganó unas elecciones ni fue nombrado por ningún gobierno. No es así como llegas a ser líder. Era un honor que te ganabas. 

Hay líderes y hay gobernantes. Nosotros los indios estamos acostumbrados a los líderes. Cuando nuestros líderes no dirigen, nos alejamos de ellos. Cuando dirigen bien, nos quedamos con ellos.

El sistema de los blancos convierte a las personas en gobernantes por ley, aún cuando no sean líderes. ¿Cómo puede un calendario decirnos cuánto tiempo es líder una persona? Eso es absurdo. Un líder es un líder mientras la gente crea en él, y mientras sea la mejor persona para guiarnos. Tú sólo puedes ser líder mientras la gente te siga.
En el pasado, cuando necesitábamos un guerrero, hacíamos de un guerrero nuestro líder. Pero cuando la guerra terminaba y necesitábamos un curandero que nos guiara, él se convertía en nuestro líder. O quizás necesitábamos un gran orador, o un pensador profundo.

El guerrero sabía cuándo terminaba su tiempo, y no pretendía ser nuestro líder más allá del tiempo que era necesitado. Se sentía orgulloso de servir a su gente, y sabía cuándo era el momento de hacerse a un lado. Si no se hacía a un lado, la gente simplemente se alejaba de él. Él no podía hacerse líder excepto guiando a la gente de la manera como la gente quería ser guiada.

 

 

Observa a los animales para ver cómo cuidan a sus crías. Observa a los ancianos para ver cómo se comportan. Observa al hombre blanco para ver qué quiere. Siempre observa primero, con corazón y mente quietos, y entonces aprenderás. Cuando hayas observado lo suficiente, entonces podrás actuar.

 

 

Si has soportado conversaciones demasiado subidas de tono, el ruido del televisor, historias tristes, el timbre del teléfono y discusiones tontas hasta el límite de tu paciencia, ¡tómate un descanso! Hay momentos en que la interacción humana necesita ser suspendida.

Una de mis maestras, la sabia Abuela Cisi, me hablaba acerca de la necesidad de sacudir la frustración en la mecedora del porche de la entrada de casa.

Podemos hallar los ritmos de la tranquilidad en la apacible monotonía de la mecedora. En esos ritmos, podemos hacer algo que encantaba a la Abuela Cisi: “dejar que nuestras mentes se relajen”.

 

 

 

Es una casta extraña 

el humano que puede mezclar 

un espíritu libre, 

una naturaleza firme,

un profundo respeto por la vida,

amor por la aventura

y un inflexible sentido de la integridad

con la felicidad personal.


Estos individuos oyen

el latido del corazón del Universo.

 

 

Sobre los maestros y los responsables

Ahora nos envías maestros y nos dices que enviemos a nuestros niños, cuando ni siquiera estamos seguros de lo que saben los maestros. Ni siquiera sabemos si son buenas personas que harán crecer los corazones de nuestros niños. Lo único que sabemos es que son maestros porque alguien les dio un pedazo de papel que dice que tomaron cursos sobre cómo enseñar.

Lo que queremos saber es qué clase de personas son y qué tienen en sus corazones para compartir. Decirnos que tienen un papel que les permite enseñar es como ponerle una envoltura elegante a una caja. Queremos saber qué hay dentro de la caja. Una caja vacía con una envoltura elegante sigue siendo una caja vacía.

 

 

Ustedes aprenden hablando. Premian a los niños que hablan más en la escuela. En sus fiestas todos tratan de hablar. En el trabajo siempre están teniendo reuniones en las que todos interrumpen a todos, y todos hablan cinco, diez o cien veces. Y le llaman "resolver un problema". Cuando están en una habitación y hay silencio, se ponen nerviosos. Tienen que llenar el espacio con sonidos. Así que hablan impulsivamente, incluso antes de saber lo que van a decir.

Nosotros los indios sabemos del silencio. No le tenemos miedo. De hecho, para nosotros es más poderoso que las palabras. 

Nuestros ancianos fueron educados en las maneras del silencio, y ellos nos transmitieron ese conocimiento a nosotros. Observa, escucha, y luego actúa, nos decían. Ésa es la manera de vivir.

 

 

Hay demasiadas cosas como para saber todo. Nosotros los indios simplemente tratábamos de saber las cosas importantes, para poder vivir mejor y comprender. Teníamos personas que podían contarnos acerca de los días de antaño y por qué eran importantes para nosotros. Hacíamos que los niños aprendieran las historias para que pudieran repetirlas justamente como habían sido contadas. Nuestra historia estaba viva.

 

 

Crecí hablando el idioma de mi gente. Lo que era importante para los indios era decir algo de la mejor manera posible. Aún observo a la gente blanca cuando habla, y me sorprenden tantas palabras. A veces dicen la misma cosa una y otra y otra vez de diferentes maneras. Son como un cazador que corre por todo el bosque tratando de tropezarse con algo, en lugar de sentarse quieto hasta poder capturarlo.

 

 

Hay un gran valor y un gran arte en mantenerse en silencio. Aprendes de esta forma. El hablar pone en evidencia a muchos hombres ante el observador silencioso.
Es al hombre silencioso, al que sólo habla cuando tiene algo realmente que decir, a quienes ellos escuchan.

“El hombre silencioso es el que hace cosas”

Impeesa - BP

 

 

Wakan Tanka puso la llama eterna del amor en el interior de cada ser viviente. Esta llama es la conexión que nos convierte a todos en una familia y el punto de unión que mantiene a la Creación unida. Cuando tocamos ese amor en nuestro interior y lo compartimos con toda la Creación, respetando el derecho a ser de todas las formas de vida, aseguramos que nuestros corazones no se enfriarán.

Ama a todas las cosas, Wakan Tanka nos guía en la búsqueda del corazón humano. Nos enseña cómo utilizar el respeto, la confianza y la intimidad como pauta para todas las relaciones. Cuando aprendemos a relacionarnos con los demás de ese modo, podemos volvernos y encararnos a nosotros mismos, queriéndonos por lo que somos y por quienes somos y convirtiéndonos en nuestro mejor amigo.

J. Sans

 

 

"La forma con que andamos por la vida es la responsabilidad mayor de todo ser humano, y deberíamos recordarlo a cada nuevo amanecer. 

 

Thomas Yellowtail, CROW

 

 

"Todo es sencillo, pero todo lo hacemos complicado. Por eso estamos confundidos"

 

Vickie Downey, Tesuque Pueblo